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En el caso de inestabilidad de la cintura pélvica, los ligamentos que mantienen unida la pelvis en la zona de la sínfisis púbica se han aflojado. Las principales causas son el estrés físico, los cambios hormonales durante el embarazo y los embarazos o partos anteriores.
La inestabilidad de la cintura pélvica se caracteriza, entre otros síntomas, por dolor pélvico, dolor en la zona lumbar, irritación de la articulación sacroilíaca y movilidad restringida.
Las mujeres embarazadas son las más afectadas por la inestabilidad de la cintura pélvica combinada con dolor pélvico. Entre el cinco y el nueve por ciento de todas las mujeres embarazadas desarrollarán inestabilidad de la cintura pélvica durante el embarazo o el nacimiento de su hijo.
ESTRUCTURA DE LA CINTURA PÉLVICA
La pelvis consta de tres componentes óseos que forman un anillo. La cintura pélvica se encuentra en la parte inferior de la espalda, conectando el tronco con las piernas. Las tres partes óseas de la cintura pélvica están conectadas por articulaciones. Estos están reforzados por cápsulas y ligamentos elásticos. Si los ligamentos están demasiado estirados, la cintura pélvica se afloja. Los resultados no son sólo dolor pélvico y movilidad restringida, sino también desalineación lateral de la columna con nervios atrapados o irritación de la articulación sacroilíaca.
INESTABILIDAD DE LA CINTURA PÉLVICA RELACIONADA CON EL EMBARAZO
Durante el embarazo, la relajación de la cintura pélvica, también conocida como relajación de la sínfisis o debilidad pélvica, puede ocurrir junto con el dolor pélvico. Debido a los cambios hormonales y al esfuerzo físico causado por el feto, los ligamentos pélvicos se estiran durante el embarazo. La inestabilidad se caracteriza principalmente por dolor pélvico y movilidad reducida. Puede ocurrir al inicio del embarazo y durar mucho tiempo después del parto.
Las hormonas del embarazo influyen en todos los ligamentos elásticos y, por tanto, también en los ligamentos pélvicos. Los ligamentos se vuelven más elásticos y flexibles. Esto sucede en preparación para el proceso de parto. La relajación de la pelvis ensancha el canal del parto por el que debe pasar el feto durante el parto. Esta relajación hormonal de los ligamentos suele producirse alrededor de la semana 20 de embarazo. En algunos casos, los ligamentos pueden estirarse más allá del grado habitual mucho antes. Esto conduce a una inestabilidad de la cintura pélvica, que puede afectar el curso del parto.
INESTABILIDAD MECÁNICA DE LA CINTURA PÉLVICA
Durante el parto, los ligamentos pueden estirarse demasiado e incluso romperse. Esto puede ocurrir cuando el parto es demasiado rápido, durante el parto con fórceps o de nalgas, o cuando el niño es muy grande. Estas complicaciones harán que otro parto sea más difícil.
INESTABILIDAD DE LA CINTURA PÉLVICA RELACIONADA CON EL DEPORTE
La inestabilidad de la cintura pélvica también puede ocurrir durante un accidente o una lesión deportiva. Una entrada de fútbol puede estirar demasiado los ligamentos tanto como el esfuerzo excesivo durante una larga sesión de correr o caminar. Una caída en ciclistas o jinetes puede provocar una lesión pélvica con la consiguiente inestabilidad.
SÍNTOMAS DE INESTABILIDAD DE LA CINTURA PÉLVICA
La inestabilidad de la cintura pélvica se caracteriza principalmente por dolor pélvico y movilidad restringida. El dolor pélvico ocurre comúnmente al levantarse, usar escaleras, agacharse, levantar objetos pesados y durante el ejercicio.
El dolor puede llegar hasta la ingle o la parte interna del muslo y, en las mujeres, a la vagina. La relajación pélvica también puede causar irritación de la articulación SI con dolor en las articulaciones sacroilíacas. Otra consecuencia de la inestabilidad de la cintura pélvica también puede ser una marcha insegura. Los afectados no pueden girar cuando están acostados y no pueden pararse sobre una pierna.
CÓMO DIAGNOSTICAR LA INESTABILIDAD DE LA CINTURA PÉLVICA
El médico puede diagnosticar la inestabilidad de la cintura pélvica basándose en los síntomas típicos mencionados. Y una TC (tomografía computarizada) puede confirmar el diagnóstico. Por lo general, se realizan exámenes adicionales para excluir otros trastornos.
TRATAMIENTO DE LA INESTABILIDAD DE LA CINTURA PÉLVICA
El objetivo del tratamiento es la reducción rápida del dolor, así como el fortalecimiento y alivio de los ligamentos. Los medicamentos y masajes de la pelvis aliviarán el dolor. La fisioterapia fortalecerá los ligamentos y los músculos circundantes. Los tratamientos con calor e infrarrojos pueden apoyar eficazmente la terapia. Estas medidas, en particular la administración de analgésicos, se toman en consulta con el médico tratante o la matrona.
Si la inestabilidad de la cintura pélvica se reconoce tempranamente y se trata a tiempo, no debería haber motivo para esperar complicaciones relacionadas durante el parto. Sin embargo, la debilidad y el dolor pélvicos pueden persistir durante semanas y meses. Por tanto, el tratamiento debe continuar después del nacimiento.
REDUCCIÓN DEL DOLOR PÉLVICO AGUDO Y PREVENCIÓN DE LA INESTABILIDAD DE LA CINTURA PÉLVICA
Una órtesis pélvica como SacroLoc puede apoyar eficazmente el tratamiento del dolor pélvico y prevenir problemas futuros. Ayuda a reducir el dolor, estabilizando la pelvis y aliviando los ligamentos estirados, en particular en el área de la articulación SI.
Dos almohadillas flexibles con protuberancias masajean los puntos gatillos típicamente dolorosos durante el movimiento y estimulan la circulación. Esto ayuda a aliviar la tensión y contrarrestar los calambres.
Usar la órtesis pélvica SacroLoc es sencillo. Su forma anatómicamente contorneada ofrece un alto grado de comodidad. Un práctico cierre abdominal con presillas para los dedos integradas facilita la colocación de la órtesis.
La misma se ajusta alrededor de la pelvis mediante dos correas y la fuerza estabilizadora se puede ajustar según sea necesario. El cierre y los bordes tienen un diseño plano para que no se corten al usarlos y apenas se noten debajo de la ropa.
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